MUSEO GUGGENHEIM (BILBAO)
Esta maravilla, que seguro que os suena, se encuentra en Bilbao, y fue probablemente lo más mencionado entre los años 1998/1999 dentro de este mundillo. Fue una revolución urbanística de la zona, ya que atrajo numerosos turistas a una zona que antes no era muy conocida. Su creación se extendió desde el año 1992 hasta el año 1997 que se inauguró.
Su autor, el conocido Frank Ghery ( que ya hemos mencionado en otras ocasiones), es el responsable de esta creación, cuyas líneas curvas y estilo propio, lo enmarcan directamente como una obra suya. Este museo se convirtió en uno de los edificios más espectaculares del mundo en el estilo deconstructivo.
Al igual que en la bodega del marqués de Riscal el edificio se asemejaba a una viña ( típico de la zona), este museo cercano al mar se asemeja a la forma y textura de la vida portuaria de Bilbao.
Se levantó a orillas del ría del Nervión, y debido al desnivel propio ( de 16 m) existente entre la cota de la ría y la cota de ciudad, hace que este edificio no oculte la ciudad, intengrandose en su entorno urbano tanto como por la altura del museo como por los materiales empleados.
El edificio esta construido con muros y techos de carga, los cuales tienen una estructura interna de barras metálicas que forman cuadrículas con triangulaciones que se unen para generar un único cuerpo.
Al igual que en otros edificios ya nombrados en nuestra página, debido al singular diseño de esta estructura, se tuvo que emplear un programa informático llamado Catia, el cual permitió calcular y diseñar estas sinuosas curvas que representa el Guggenheim así como el número de barras metálicas (de los muros y techos de carga) necesarias en cada lugar, especificando su disposición y orientación.
En cuánto a materiales, consta de piedra caliza, titanio y cristal. Hay que decir que el cristal se le dió un tratamiento especial para que sin dejar pasar el calor dejará pasar la luz solar, y a su ve evitar que la luz natural dañe las piezas expuestas.
Un dato curioso de este edificio es que, como rara vez ocurre, fue construido cumpliendo con tiempo y presupuesto.
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