HAGIA SOPHIA ( SANTA SOFÍA)

La basílica de santa Sofía se salvó de su destrucción gracias a su conversión a mezquita. Fue la mayor iglesia del mundo cristiano. En el año 537 el emperador Justiciano consagró esta basílica a la Divina Sabiduría de Dios. Se encuentra en Estambul, Turquía.

La construcción definitiva se llevó a cabo entre los años 532 y 537 durante un periodo conocido como Primera Edad de Oro.

La cúpula es la gran protagonista de la estructura constructiva tanto por sus impresionantes dimensiones: 31 metros de diámetro y 56 de altura como  por su construcción, la cual está hecha a base de ladrillos puestos de canto y gruesos lechos de mortero para conseguir una mayor ligereza.

La genialidad del diseño de Hagia Sophia se encuentra en su interior cuando los visitantes se sitúan en el centro de la cúpula  y al dar palmadas se puede oír un perfecto eco, y esto es así gracias a que la cúpula esta sostenida por 4 pilares ocultos en la estructura ( que transmiten el peso de la cubierta, por medio de arcos transversales, a los contrafuertes exteriores) y está construida con materiales porosos y ligeros de la mejor calidad, ya que en su antigüedad lo usaban los emperadores y sultanes para hacerse oír en todo el vasto interior.

Si os impresiona esta construcción por el exterior, no os imagináis el interior con mosaicos bizantinos y ornamentos islámicos sobre un suelo de oro.

Los autores de esta increíble construcción son Antemio de Tralles e Isidoro de Mileto.

La construcción que vemos hoy en día difiere mucho con la original debido a las numerosas reformas que se han hecho debido a varios terremotos.

 

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